Contra el Calvinismo
El término calvinismo es profundamente inservible. Se acuñó como herramienta polémica para empañar la reputación de los reformados, y no tiene ninguna utilidad real para la historia intelectual moderna. Son mucho mejores los términos ‘teología reformada’ y ‘ortodoxia reformada’, ya que realmente reflejan el hecho de que los llamados calvinistas no eran los que veían a Calvino como la principal autoridad teológica, sino los que se guiaban por la tradición de las confesiones reformadas.