Los ciclos anuales de lectura bíblica en el Libro de Oración Común, parte 1
He aquí un orden para la oración (en lo que se refiere a la lectura de las Sagradas Escrituras) muy acorde con la mente y el propósito de los antiguos padres, y mucho más provechoso y práctico que el que se usaba últimamente. Es más provechoso, porque aquí se omiten muchas cosas, de las cuales algunas son falsas, otras inciertas, otras vanas y supersticiosas: y no se ordena leer nada, sino la purísima palabra de Dios, las Sagradas Escrituras, o lo que evidentemente se fundamenta en ellas; y esto en tal lenguaje y orden, como sea más fácil y sencillo para el entendimiento, tanto de los lectores como de los oyentes.