La tentación de la celebridad teológica: ¿Por qué los nuevos ministros deben tomarse su tiempo?
El verdadero ministerio no se trata de ser una celebridad, escribir libros y publicaciones en blogs, sino de ministrar los medios de gracia, palabra y sacramentos, y cuidar a las ovejas heridas y necesitadas. Creo que muchos ministros persiguen la fama y sus congregaciones sufren como resultado de esto. El Señor puede decidir usarlo en formas poderosas, más allá del alcance de su propia congregación. Si lo hace, alabe a Dios. Pero no olvides que el ministerio trata sobre tus ovejas, tu congregación.